Eficacia de la magnetoterapia (PEMF) en la rehabilitación de una avulsión ósea del tendón directo del recto femoral en futbolista profesional: reporte de caso y revisión de la evidencia.
Por: Mauricio Arancibia Olhabe
Autor: Mauricio Arancibia Olhabe, Kinesiólogo y Licenciado en Terapia Física y Rehabilitación; Magíster en Medicina y Ciencias del Deporte; especialista chileno con estudios en Chile, España y Perú.
Afiliación: Clínica de Fisioterapia FISIOMED Perú, Lima, Perú.
Correspondencia: FISIOMED Perú. Correo del autor: lic.mauricio.olhabe@gmail.com
RESUMEN
Introducción: La magnetoterapia con campos electromagnéticos pulsados (PEMF) se emplea como coadyuvante en la consolidación ósea y en la reparación de tejidos músculo‑tendinosos. Su aplicación en avulsiones entesiales del recto femoral en deportistas de alto rendimiento cuenta con evidencia clínica incipiente.
Objetivo: Describir la evolución clínica y funcional de una futbolista profesional con diagnóstico ecográfico de desgarro con avulsión ósea del tendón directo del recto femoral izquierdo, tratada con un protocolo integral de fisioterapia que incluyó PEMF, y contextualizar los hallazgos con la evidencia científica disponible.
Caso clínico: Mujer de 28 años, futbolista del club BIAVO F.C. de la liga femenina profesional del Perú. El 17 de abril de 2024 la ecografía musculoesquelética, realizada por el Dr. Luis Samaniego Flores, informó: “se observa presencia de desprendimiento óseo con hipoecogenicidad central que corresponde al tendón directo del recto femoral en su inserción en la espina ilíaca anterosuperior; tendón indirecto normal. Conclusión: impresión diagnóstica: desgarro con avulsión ósea del tendón directo del recto femoral izquierdo”.
Intervención: Programa por fases (abril–julio de 2024) con educación, control de carga, ejercicio terapéutico progresivo, terapia manual no provocativa y PEMF dosificada dentro de rangos reportados para estimulación osteogénica y de inserciones tendinosas (baja frecuencia, densidad de flujo en miliTesla, 30–60 min por sesión).
Resultados: Se logró resolución del dolor, recuperación de la fuerza y de la función específica del gesto deportivo, y retorno a entrenamientos y competencia oficial en julio de 2024. La deportista continúa activa en liga profesional sin limitaciones clínicas.
Conclusiones: La integración de PEMF a un plan de rehabilitación basado en ejercicio fue segura y se asoció a recuperación funcional completa en plazos consistentes con la literatura para avulsiones de la EIAS. La evidencia disponible respalda su uso como coadyuvante en consolidación ósea y su potencial beneficio en la cicatrización tendón‑hueso; se requieren estudios comparativos en deportistas para precisar dosimetría y subgrupos que más se benefician.
Palabras clave: Magnetoterapia; PEMF; avulsión ósea; recto femoral; espina ilíaca anterosuperior; fisioterapia deportiva; fútbol profesional; caso clínico.
INTRODUCCIÓN
Las avulsiones óseas de las espinas ilíacas son lesiones entesiales que ocurren por contracciones musculares explosivas o desaceleraciones bruscas. Aunque predominan en adolescentes por la vulnerabilidad apofisaria, también se presentan en adultos jóvenes que practican deportes de potencia como el fútbol. La avulsión del origen directo del recto femoral en la espina ilíaca anterosuperior (EIAS) se manifiesta con dolor súbito y localizado en la región anterior de cadera, limitación para correr, chutar y esprintar, y sensibilidad a la palpación sobre la inserción del tendón.
El manejo conservador es el estándar cuando el desplazamiento del fragmento es limitado; incluye reposo relativo, control de carga, analgesia, fisioterapia y progresión a fortalecimiento y tareas específicas. En series clínicas, el retorno al deporte con manejo no quirúrgico suele situarse entre 8 y 12 semanas, condicionado por el dolor, la fuerza, la función y la demanda del deporte. La magnetoterapia mediante campos electromagnéticos pulsados (PEMF) es una intervención no invasiva que ha demostrado incrementar la tasa de unión y reducir el dolor en fracturas seleccionadas de acuerdo con metaanálisis y revisiones recientes. En modelos preclínicos de inserciones tendinosas, la PEMF mejora propiedades mecánicas del tendón, organización del colágeno y calidad ósea en la interfase tendón‑hueso, lo que apoya su empleo como coadyuvante en lesiones entesiales.
Con base en ello, se implementó un programa de rehabilitación por fases que integró PEMF como coadyuvante, buscando optimizar la consolidación y acelerar la recuperación funcional en una futbolista profesional con avulsión de la EIAS.
INTERVENCIÓN Y DOSIFICACIÓN (PROGRAMA POR FASES)
La intervención se diseñó por fases, con objetivos, criterios de progresión y dosificación preestablecidos. La PEMF se utilizó como coadyuvante a la educación, el control de carga y el ejercicio terapéutico.
Fase 1 – Aguda (semana 0–2; segunda quincena de abril de 2024)
• Objetivos: control del dolor, protección de la entesis, mantenimiento de la condición general.
• Carga: reposo relativo; marcha según tolerancia; evitar sprints y golpeo de balón.
• Ejercicio: activación isométrica de cuádriceps en rangos indoloros (3–5 series de 30–45 s), movilidad de cadera no provocativa, trabajo de core y glúteo medio de baja carga.
• Magnetoterapia (PEMF): aplicación local sobre EIAS izquierda mediante solenoide de tamaño medio (contacto indirecto), con parámetros dentro de rangos descritos para estimulación osteogénica de baja frecuencia: frecuencia 15–25 Hz; densidad de flujo 1,5–3,0 mT (≈15–30 Gauss); 30–45 min por sesión, 5 días/semana.
• Agentes complementarios: crioterapia breve post‑ejercicio según síntomas.
Fase 2 – Subaguda (semana 3–6; mayo de 2024)
• Objetivos: recuperar rangos de movimiento, fuerza inicial y tolerancia a cargas lineales.
• Carga: progresión de marcha rápida a trote lineal controlado; evitar cambios bruscos de dirección.
• Ejercicio: fortalecimiento de cadena anterior y posterior con énfasis en control lumbopélvico (puentes, step‑ups, prensa liviana), excéntricos tolerados de cuádriceps, movilidad de cadera y manejo de tejidos blandos adyacentes.
• Magnetoterapia (PEMF): frecuencia 15–50 Hz; densidad de flujo 2,0–3,5 mT; 40–60 min, 4 días/semana; ajuste según respuesta clínica.
• Terapia manual: técnicas miofasciales y movilizaciones accesorias no provocativas.
Fase 3 – Remodelación y preparación específica (semana 7–10; junio de 2024)
• Objetivos: fuerza y potencia simétricas, tolerancia a cambios de dirección y chutes progresivos.
• Carga: carrera intermitente, cambios de dirección 45–90°, pliometría de doble → unipodal, chutes submáximos → máximos con dolor 0/10.
• Ejercicio: sentadilla y prensa con progresión de carga, excéntricos de cuádriceps y rotadores de cadera, drills de aceleración–desaceleración y control de valgo dinámico.
• Magnetoterapia (PEMF): 2–3 sesiones/semana, 40–60 min; mismos rangos de frecuencia; uso coadyuvante para remodelación entesial y recuperación postcarga.
Fase 4 – Retorno al deporte (semana 11–12+; julio de 2024)
• Objetivos: criterios de alta deportiva y reintegro competitivo completo.
• Carga: entrenamientos completos con monitoreo de carga interna (RPE) y externa (volumen de carrera, número de chutes).
• Criterios de alta: dolor 0/10 en tareas específicas; fuerza simétrica con diferencia <10% entre lados por pruebas manuales/dinamometría; tolerancia a batería de saltos y sprints; autorización médica del club.
• Magnetoterapia (PEMF): mantenimiento 1–2 veces/semana como coadyuvante de recuperación según síntomas.
Justificación de la dosificación: las frecuencias bajas (≈8–50 Hz) y densidades de flujo del orden de 1–4 mT se han utilizado en estudios clínicos de consolidación ósea, con exposiciones diarias que varían de 40 minutos a varias horas por 8–12 semanas; en modelos animales de reparación tendón‑hueso se han observado mejoras mecánicas e histológicas con protocolos de baja frecuencia y aplicaciones diarias. Se descartaron contraindicaciones (marcapasos u otros dispositivos electrónicos implantables, embarazo) antes de iniciar la terapia.
RESULTADOS CLÍNICOS Y FUNCIONALES
No se registraron eventos adversos atribuibles a la magnetoterapia. La evolución mostró disminución progresiva del dolor, recuperación de rango de movimiento y fuerza, y tolerancia creciente a cargas específicas del fútbol (aceleraciones, cambios de dirección y golpeo). El retorno controlado a la cancha se inició a finales de junio y la participación plena en competencia se produjo a finales de julio de 2024.
Medidas de resultado: se utilizaron escalas y pruebas estandarizadas (escala visual análoga de dolor; cuestionarios funcionales de cadera; valoración de fuerza mediante pruebas manuales y dinamometría cuando estuvo disponible; y pruebas de campo de carrera y salto). Los registros clínicos consignan asimetrías de fuerza <10% al alta, dolor 0/10 en gestos específicos y autorización médica para reintegro competitivo. La jugadora compite sin limitaciones clínicas al momento de este informe.
DISCUSIÓN
La recuperación de esta futbolista se alinea con los tiempos publicados para el manejo conservador de avulsiones de la EIAS con desplazamiento limitado, en los que el retorno suele observarse entre las 8 y 12 semanas con programas estructurados de rehabilitación.
La integración de PEMF como coadyuvante se sustentó en: (1) evidencia clínica y de políticas sanitarias que reconoce su utilidad en consolidación ósea de fracturas y retardos de consolidación; (2) estudios preclínicos que demuestran efectos beneficiosos en la interfase tendón‑hueso; y (3) plausibilidad biológica respecto de la modulación de señales celulares involucradas en la osteogénesis y la entesogénesis.
La literatura clínica sobre PEMF en consolidación ósea incluye metaanálisis que muestran aumentos en la tasa de unión y reducción del dolor frente a placebo en determinadas indicaciones, si bien la heterogeneidad de protocolos y poblaciones obliga a individualizar su uso. Los parámetros descritos con mayor frecuencia en contextos de fractura oscilan entre 8 y 50 Hz, densidades de flujo de 1–4 mT, exposiciones diarias de 40 minutos a 8 horas y duración de 8–12 semanas. En modelos animales de reparación del manguito rotador y del tendón de Aquiles, la PEMF ha mejorado la organización del colágeno, la mineralización en la interfase y la resistencia mecánica, lo que sugiere un efecto facilitador sobre la cicatrización tendón‑hueso.
Antes de la administración se verificaron contraindicaciones absolutas (dispositivos electrónicos implantables como marcapasos o desfibriladores) y precauciones (embarazo, procesos infecciosos agudos, sangrado activo). La paciente no presentaba contraindicaciones. Las decisiones se individualizaron y se siguieron las guías del fabricante del equipo utilizado.
DECLARACIÓN DE AUTORÍA Y CONTRIBUCIONES
El autor (Mauricio Arancibia Olhabe) concibió el estudio, realizó la evaluación y el tratamiento, recopiló los datos clínicos y redactó el manuscrito.
CONSIDERACIONES ÉTICAS
Se obtuvo consentimiento informado por escrito para el uso docente‑científico de datos clínicos no identificables. El reporte se adhiere a las recomendaciones CARE para reportes de caso.
CONFLICTOS DE INTERÉS Y FINANCIAMIENTO
El autor declara no tener conflictos de interés. No se recibió financiamiento externo específico para esta publicación.
REFERENCIAS (selección)
[1] Scientific Reports (2016): Meta‑análisis de ensayos aleatorizados de estimulación eléctrica para consolidación ósea (incluye PEMF), con reducción de no‑unión y del dolor.
[2] Bioelectromagnetics (2020): Meta‑análisis sobre la efectividad de PEMF en consolidación de fracturas; evidencia de mayor tasa de unión y alivio del dolor.
[3] Tucker JJ, et al. J Orthop Res. 2017;35(4):902‑909. PEMF mejora la cicatrización tendón‑hueso en modelo de manguito rotador en ratas.
[4] J Orthop Res (2022): PEMF altera favorablemente procesos celulares y moleculares en supraespinoso y hueso adyacente tras reparación.
[5] Frontiers in Bioengineering & Biotechnology (2025): Revisión sobre respuestas de hueso y cartílago a PEMF.
[6] Políticas médicas BCBS (2025): Protocolos de PEMF para retardos de consolidación (p. ej., 8 h/día por 90 días en determinados dispositivos).
[7] StatPearls/NCBI (2024–2025): Avulsiones de espinas ilíacas; manejo conservador y tiempos de retorno.
[8] POCUS Journal (2022): Diagnóstico ecográfico de avulsión de espina ilíaca; hallazgos característicos.
[9] MDPI/Applied Sciences (2024): Revisión sobre PEMF en consolidación ósea y preservación articular.
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